Estas navidades serán especiales en el corazón de Madrid, ya que la ciudad se prepara para la esperada inauguración de la Puerta de Alcalá.
Después de más de seis meses de intensos trabajos de rehabilitación, este monumento emblemático se presenta renovado y listo para deslumbrar a los madrileños y visitantes.
«Por Redacción Madridcanalla»
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Renovación que Trasciende el Tiempo
La Puerta de Alcalá, un testigo silencioso de la historia madrileña, ha estado en manos de expertos durante más de medio año para sufrir una transformación completa. Los trabajos de rehabilitación no solo buscaron restaurar su esplendor original, sino también garantizar que esta joya arquitectónica perdure en su esplendor durante muchos años más. En los trabajos de restauración se ha podido comprobar (dicho por los expertos) el deterioro que tenía dicho monumento y es que es de esperar, sus más de 245 años de historia, hacen que la puerta tenga deterioros por conflictos bélicos en la capital, ha pasado dos guerras, la de la independencia en 1808 y la civil en 1936, además de las inclemencias del tiempo y la contaminación de los vehículos que pasan todos los días por ella. Era hora de ponerla «guapa«.
Historia de la Puerta de Alcalá
Ubicada majestuosamente en el centro de la Plaza de la Independencia, la Puerta de Alcalá se erige como un testamento de la rica historia de Madrid, con 245 años de elegancia y significado arraigados en sus imponentes pilares. Esta puerta monumental, una de las cinco antiguas entradas reales a la ciudad, cuenta con una historia fascinante que ha marcado el devenir de la capital española. La historia de la Puerta de Alcalá comienza en el siglo XVIII, cuando Carlos III decide reemplazar una puerta anterior que se remontaba al siglo XVI. La visión del monarca era clara: una entrada monumental que reflejase la grandeza de Madrid y sirviera como símbolo de bienvenida para aquellos que se acercaban a la ciudad.
La construcción de esta obra maestra arquitectónica se llevó a cabo con meticulosidad y elegancia. La Puerta de Alcalá fue inaugurada en 1778, convirtiéndose instantáneamente en un faro de bienvenida y un punto de referencia en el paisaje urbano de Madrid. Situada estratégicamente, la Puerta de Alcalá no solo cumple su función como entrada monumental, sino que también se convierte en el núcleo de confluencia de calles emblemáticas como Alcalá, Alfonso XII y Serrano. Su posición central la hace testigo de la evolución y el bullicio de la ciudad a lo largo de los años. Su nombre refiere por estar situada al camino que conduce al municipio de Alcalá de Henares. Es un icono turístico y cultural de Madrid, rodeada por el esplendor del Parque del Retiro. Su creador fue Francesco Sabatini, quien supo diseñar la puerta que tanto ansiaba Carlos III.
Su puesta apunto:
Su remodelación empezó en el mes de febrero del 23, poniendo una lona con la imagen de la puerta de Alcalá, los turistas que han llegado hasta la fecha, se tenían que conformar con llevarse una foto de la lona que recubria la puerta. Todo este tiempo ha sido cuidada y restaurada por expertos en restauración de obras de arte, haciendo que, la puerta más querida de Madrid, se vea resplandeciente a partir de ahora. No tenemos una fecha exacta para la inauguración del monumento, pero sí nos han dado pistas desde el ayuntamiento de Madrid, diciendo que estará totalmente descubierta para estas navidades. Pondrán en la majestuosa puerta un belén, con motivo de las navidades.
Estamos impacientes de ver y fotografiar la puerta, tras los retoques que hará que rejuvenezca al paso de los años.