– El Mundial de Qatar se ha visto envuelto en gran cantidad de polémicas incluso antes de haber empezado.

– El evento que se celebra cada cuatro años, llama la atención de por sí a los fanáticos del fútbol y del deporte. Sin embargo, este año, el punto de mira se ha puesto más allá.

«Por Sara Martínez»


Al principio, saltaron las alarmas con el éxito de la candidatura qatarí para albergar el campeonato, en un país que nunca antes se había clasificado en esta competición. Si pensabais que la polémica se iba a quedar aquí, estabais muy equivocados; En comparación con lo que le siguió, la elección de la sede, es el menor de nuestros problemas como sociedad.

El clima que hace en la época que se celebra el mundial con normalidad en el país qatarí y las temperaturas, obligó a cambiar las fechas y con ello, descuadrar el calendario. Pero no, esto, tampoco es lo más importante. Las lamentables condiciones ofrecidas a los trabajadores, han acabado con ellos; Qatar, ha hecho un uso extensivo de mano de obra migrante para construir los estadios de fútbol en los que se están disputando los partidos. La cifra de trabajadores fallecidos por hacer tareas peligrosas, bajo un calor extremo por un salario de mierda, asciende a 6.500 personas desde 2010. Sí, personas, qué es lo que son. El Gobierno de Qatar, se ha lavado las manos y ha rechazado la acusación de la cual no se piensa hacer cargo, igual que con las indemnizaciones a las familias que han sufrido una pérdida por su mala gestión, poca empatía y egoísmo. Esta, es una de las principales razones por las que innumerables personajes públicos han renegado del acontecimiento. Por ser un mundial manchado con sangre, sangre de la que nadie se hace responsable. Miran para otro lado como si nada hubiese pasado, mientras siguen celebrando su fiesta del fútbol con tranquilidad.

Por si no fuese suficiente, aún hay más. La cantidad de prohibiciones que ha comunicado el gobierno Qatarí para que se lleven a cabo durante el mundial, todavía nos han dejado más boquiabiertos. No poder demostrar afecto en público; apuestas prohibidas y el consumo de alcohol; los hombres no pueden mostrar los hombros ni las rodillas y las mujeres han de ir tapadas hasta los tobillos para acceder a los estadios; celebrar en las calles; hablar con mujeres en público; y no mostrar banderas sobre la comunidad LGBTIQ+. El incumplimiento de dichas normas está penado con cárcel entre 11 y 15 años. En Qatar, a la vista está, después de dichas normas, están criminalizadas las relaciones entre personas del mismo género. Allí, la violación está penada con tan solo 7 años de cárcel, mientras que amar libremente duplica la pena. Además, de que el gobierno ​censura los contenidos que tienen relación con la identidad de género y orientación sexual. Entre la discriminación y criminalización a la comunidad LGBTIQ+ y los derechos oprimidos de los que constan allí las mujeres, se han coronado. Viven en un mundo donde las mujeres siguen estando subordinadas bajo la tutela de sus “guardianes”, hombres que las tienen como propiedad.

También se señaló a Qatar como un país que mantiene vínculos con grupos terroristas en 2017, algo que por supuesto, también negaron. ¿Qué raro verdad?. Algunos jugadores, selecciones y personalidades, con dos dedos de frente, plantearon llevar un brazalete durante la celebración del Mundial con el lema “One Love” y los colores de la bandera LGBTIQ+.

La FIFA, ante esta decisión amenazó con poner multas económicas, un riesgo que estaban dispuestos a correr. Tras ver que no causó miedo, lanzó otra perlita. Tarjeta amarilla nada más comenzar el partido a quién lo llevase, algo, que ponía en una tesitura difícil a los participantes y sus resultados. Increíble que en una competición de este calibre, el fútbol, no sea solo fútbol y puedan pasarse las normas arbitrarias por el forro cuando les convenga, aunque esto mismo sea ilegal, pues en ningún reglamento consta que eso sea una falta. Aún así, personalidades como la Ministra del Interior de Alemania y periodistas presentes en las entrevistas, han portado el brazalete a modo de protesta ante la situación.

Las selecciones que han tenido un gesto antes de empezar el partido para serle fiel a sus principios han sido: Alemania, tapándose la boca en la foto, haciendo referencia a la censura que caracteriza al país anfitrión; Irán, arrodillándose como protesta por los derechos de la mujer o Inglaterra, como iniciativa por el racismo.

La leyenda del fútbol iraní, Ali Daei no acudirá al mundial por solidaridad con las protestas. Al igual que artistas nacionales como Chanel Terrero e internacionales como Rod Stewart, Dua Lipa, Shakira o streamers como Ibai Llanos, que rechazaron la oferta de acudir a la celebración del fútbol por principios morales. Al contrario que otros nombres como Black Eye Peas, J.Balbin, Maluma, J a son Derulo o Ribbie Williams y un largo etc, que si han aceptado participar en el Mundial de Qatar 2022. Algunos han explicado que irán y que lo que no esté relacionado con el fútbol no les compete y no es su función, ni pueden solucionarlo.

Pero, ¿Y España? Un país que aboga por la democracia, la inclusión, igualdad y el amor libre no ha tenido ningún gesto ni ha considerado adecuado mojarse en dichas polémicas. Tal y como ha dicho el seleccionador, se limitan a jugar, que esa es su tarea, porque son futbolistas. Me parece que, antes de ser jugadores, son personas. Y como humanos con capacidad afectiva y para pensar, deberíamos luchar por nuestros derechos y ayudar a aquellos a los que se los quitan. No pronunciarnos, solo nos hace cobardes y con unos valores morales muy dudosos.

Eden Hazard, jugador de la selección belga, comunicó tras el partido que habría sido mejor no hacer el gesto de apoyo y ganar el encuentro. Ganar, ganar y ganar, antes que ser persona, no se si son los principios que definen al fútbol, un deporte de equipo y compañerismo dentro y fuera del campo.

Un mundial claramente muy desacertado y todavía más si centramos la atención en las equipaciones. De Guatemala a Guatepeor, como se suele decir.

El top 5 de las camisetas más feas del mundial según nuestro equipo de Ponzanito:

En el quinto puesto, Uruguay. Con la segunda equipación puesta, se parecen más a un policía nacional que a un jugador de fútbol, ¡No jodas, loco!. (Mucho mejor su expresión que la camiseta, sin lugar a dudas).

El cuarto puesto es para Senegal que tampoco ha acertado con la segunda opción que se asemeja a las señales de tráfico…(Si no tenéis carnet de conducir, ir practicando).

El segundo puesto lo ocupa Ghana, que no se ha quedado atrás con ese número en la parte delantera con un recuadro más grande que el marcador del partido.

¡SUIZA!. Ya puede retirarse y así nos deja descansar la vista, porque… mejor no digamos que es horrible, pero si, difícil, muy difícil de mirar.

Y por último, la selección galardonada, por la Revista Ponzanito con la camiseta más fea del Mundial de Qatar 2022 es…(redoble de tambores)

¡ESPAÑA! Se ha llevado nuestro primer premio. (Por lo menos hemos ganado un título en este mundial). Como vamos a ganar un mundial o el partido, con la segunda camiseta que llevábamos ante Marruecos. Nuestros jugadores parecían forros de colchones por el campo, pero además de los antiguos. ¡Que fea!. Gracias a la federación y a Adidas por el premio.

POR SARA MARTÍNEZ RUIZ