El hechizo de las Verbenas más castizas
POR REDACCIÓN MADRIDCANALLA
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¡Ay, madre mía, cómo nos gusta una buena verbena! San Cayetano, San Lorenzo y la Paloma ¡Agárrense los machos que vienen curvas! Madrid se pone guapa y se llena de música y alegría para celebrar sus fiestas más castizas. En agosto, Madrid se viste de chulapa y chulapo para celebrar a lo grande las fiestas más castizas del año: San Cayetano, San Lorenzo y la Paloma. Olé, olé y olé. Estas fiestas son la excusa perfecta para tomarse unas cañitas, bailar un chotis y, por qué no, lanzarse al perreo, que la tradición está muy bien, pero la marcha nunca sobra.

San Cayetano: El inicio de la juerga
Todo comienza el 7 de agosto con San Cayetano, en el barrio de Embajadores. Este santo es el patrón de los desempleados, así que si andas buscando curro, igual te viene bien pedirle una ayudita. La historia dice que San Cayetano fue un santo italiano que, allá por el siglo XVI, fundó la orden de los Teatinos. Pero dejémonos de rollos históricos y vayamos al grano: la fiesta. Aquí es donde se calienta motores, con procesiones, fuegos artificiales y mucho trasnochar. El epicentro es la iglesia de San Cayetano, donde los vecinos decoran las calles con guirnaldas y farolillos. No puede faltar la limonada, la música en directo y, por supuesto, los concursos de chotis. ¿Qué mejor manera de quemar la grasa de los bocatas de calamares que con unos pasitos de baile?
¿Quién toca?
VenturiI x Mahou,
Enrique Heredia «Negri»,
Los Justicieros
y Tangerine Flavour.

San Lorenzo: Seguimos con la resaca
Sin apenas tiempo para recuperarse, el 10 de agosto llega San Lorenzo, y es en Lavapiés donde se desata la locura. Este barrio es conocido por su ambiente multicultural. Este santo, dicen, fue un mártir romano que acabó en la parrilla. No es de extrañar que las brasas sean protagonistas en esta verbena, con sus barbacoas callejeras que te hacen salivar solo de olerlas. La iglesia de San Lorenzo es el punto de encuentro para los más devotos, pero vamos, que la procesión es solo el aperitivo. Lo mejor viene con los conciertos, las barras al aire libre y las noches interminables. Además, Lavapiés es famoso por su diversidad, así que aquí la música se mezcla, y lo mismo te bailas una salsa que un rock.
¿Quién toca?
Atraco,
Fiesta Bresh x Mahou,
La Ganga Calé
y The Stoned Tribute.
La Paloma: El apoteosis castizo
Y por último, como traca final, llega la Virgen de la Paloma, del 11 al 15 de agosto. Esta es la madre de todas las fiestas, la que saca a la gente a la calle como si no hubiera un mañana. La que te deja sin voz de tanto cantar y sin piernas de tanto bailar. La Latina se convierte en un hervidero de gente con ganas de pasarlo bien. La tradición manda llevar mantones de Manila y vestirse de chulapo/a, pero vamos, que aquí cada uno va como quiere. Lo importante es disfrutar de las actividades: desde el concurso de mantones hasta los conciertos de música en directo. El epicentro es la iglesia de la Paloma, donde se venera a esta virgen tan querida por los madrileños. Pero lo mejor es que esta fiesta se vive en las calles de La Latina, con sus balcones decorados y las barras llenas de bebidas bien fresquitas. Aquí la música no para, y los bailes se mezclan con los conciertos más gamberros.
¿Quien toca?
Vicco,
Banda Tributo Sildavia,
Rafa Sánchez,
Karmento,
Kiki Morente,
Cool Nenas
Dj X Mahou,
Burning
y Amistades Peligrosas.

Para todos los gustos
Mucho más que tradición, estas fiestas no son solo para los de aquí; turistas de todas partes se acercan para vivir el auténtico espíritu madrileño. Porque Madrid es mucho más que una ciudad, es una forma de vivir. Y estas fiestas son la mejor excusa para conocer la verdadera esencia de los madrileños: gente abierta, fiestera y siempre dispuesta a pasárselo bien. Así que, ya sabes, si tu colega te pregunta ¿unas cañas? dile sí y, la zona ya la sabes a dónde llevarlx. Ponte tu mejor sonrisa y sal a la calle, que en agosto Madrid no duerme. ¡No te pierdas estas fiestas! Pilla tu mantón, ponte cómodx y prepárate para disfrutar de lo lindo. ¡Viva San Cayetano, San Lorenzo y la Paloma! ¡Viva Madrid y viva las fiestas más castizas!